Debilidad de suelo pélvico: prevención y mejores tratamientos

La debilidad del suelo pélvico es una condición que, a pesar de que afecta a muchas personas, con frecuencia no se discute abiertamente.

El suelo pélvico desempeña un papel clave en funciones cotidianas como la micción, defecación y el soporte de órganos vitales. Cuando se debilita, pueden surgir una serie de complicaciones, desde incontinencia urinaria hasta problemas sexuales.

En este artículo, analizaremos en detalle qué implica la debilidad del suelo pélvico, los riesgos asociados y cómo prevenir esta condición.

Asimismo, nos adentraremos en los tratamientos más efectivos para fortalecer el suelo pélvico, tanto en mujeres como en hombres.

Qué es el suelo pélvico

El suelo pélvico es un conjunto de músculos, tejidos y ligamentos que forman una especie de red en la parte inferior de la pelvis y se extiende desde el hueso púbico hasta el cóccix.

Su función principal es sostener los órganos pélvicos, como la vejiga, el útero y el recto, manteniéndolos en su posición correcta.

También, el suelo pélvico es esencial en el control de funciones como la micción, la defecación y la función sexual, así como al soporte durante la actividad física.

• Signos y síntomas de un suelo pélvico debilitado
• Sensación de presión o pesadez en la pelvis
• Dolor en la zona pélvica, la espalda baja o los genitales
• Dificultad para controlar la vejiga o los intestinos
• Urgencia urinaria frecuente
• Dolor durante las relaciones sexuales
• Sensación de desconexión o debilidad en la pelvis
• Dolor al orinar o defecar
• Fatiga o debilidad muscular en la zona pélvica
• Cambios en la forma del abdomen
• Dificultad para mantener una postura adecuada
• Riesgos asociados

Es fundamental destacar que evitar la debilidad del suelo pélvico es esencial para prevenir una serie de riesgos y complicaciones potenciales, como:

Incontinencia urinaria

La debilidad del suelo pélvico puede contribuir al desarrollo de la incontinencia urinaria, donde se experimentan fugas involuntarias de orina, especialmente al reír, estornudar o realizar esfuerzos físicos.

Lee aquí nuestra guía >> Incontinencia urinaria: qué es y cómo tratarla 

Prolapso de órganos pélvicos

La falta de tono en el suelo pélvico se refiere a la debilidad de los músculos y tejidos que sostienen los órganos pélvicos, como la vejiga, el útero y el recto.

Cuando estos músculos están debilitados, los órganos pélvicos pueden perder su soporte natural y comenzar a descender o caer fuera de su posición normal, lo que se conoce como prolapso.

En las mujeres, esto puede manifestarse como un prolapso de la vejiga, el útero o ambos, donde estos órganos pueden descender hacia la vagina. 

En ambos géneros, la falta de tono en el suelo pélvico también puede provocar molestias en la región anal, ya que los músculos debilitados pueden afectar la función normal del recto y el ano.

Disfunciones sexuales

Tanto en hombres como en mujeres, la debilidad del suelo pélvico puede influir negativamente en la función sexual, dando lugar a dificultades como la disfunción eréctil en hombres o el dolor durante las relaciones sexuales en mujeres.

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Complicaciones en el embarazo y el parto

En mujeres, la debilidad del suelo pélvico puede aumentar el riesgo de complicaciones durante el embarazo, como el prolapso uterino, y dificultar el proceso de parto.

La prevención, por lo tanto, es una herramienta clave para evitar estos riesgos y mantener la salud del suelo pélvico a lo largo del tiempo.

Cómo fortalecer el suelo pélvico

Aquí hay algunas estrategias para mantener esta área vital fuerte y saludable:

• Ejercicios de Kegel para fortalecer el suelo pélvico. Los ejercicios de Kegel son una forma efectiva de fortalecer los músculos del suelo pélvico. Consisten en contraer y relajar los músculos que controlan el flujo de la orina. Practicar estos ejercicios regularmente puede mejorar la fuerza y resistencia del suelo pélvico. 
• Mantenimiento de un peso saludable. La obesidad puede ejercer presión adicional sobre el suelo pélvico, por lo que se recomienda mantener un peso saludable, seguir una dieta equilibrada y realizar ejercicio de forma regular.
• Evitar el estreñimiento. El esfuerzo durante la evacuación intestinal puede afectar negativamente los músculos del suelo pélvico. Mantener una dieta rica en fibra y beber suficiente agua puede prevenir el estreñimiento y reducir la presión sobre estos músculos.
• Prácticas sexuales seguras. Existen una serie de posturas sexuales que ayudan a fortalecer y mantener la salud del suelo pélvico.
• Buena técnica al levantar objetos pesados. Al levantar objetos pesados, es importante utilizar una técnica adecuada para evitar la presión excesiva en el suelo pélvico. Doblar las rodillas y mantener la espalda recta puede ayudar a distribuir la carga de manera más efectiva.
• Evitar el tabaco. El tabaquismo puede aumentar el riesgo de incontinencia urinaria, por lo que dejar de fumar es beneficioso.

Mejores tratamientos de rehabilitación el suelo pélvico

En caso de que la debilidad del suelo pélvico ya esté presente, existen tratamientos efectivos que pueden ayudar a fortalecer esta área y mejorar los síntomas.

Tratamientos de rehabilitación de suelo pélvico para mujeres

• Fisioterapia pélvica: ejercicios guiados por un fisioterapeuta especializado.
• Electroestimulación: estimulación eléctrica para fortalecer los músculos pélvicos.
• Dispositivos de Biofeedback: son dispositivos que brindan información visual sobre la actividad muscular para mejorar el control.
• Cirugía de suelo pélvico: en casos graves, la cirugía puede ser una opción para reparar y fortalecer el suelo pélvico.

Tratamientos de rehabilitación de suelo pélvico para hombres

• Ejercicios de Kegel: proporcionan fortalecimiento específico de los músculos del suelo pélvico.
• Entrenamiento con banda elástica: utilización de bandas elásticas para fortalecer la zona.
• Asesoramiento sobre estilo de vida: cambios en la dieta y la actividad física para mejorar la salud general.

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